Escondida, valiosa, buscada y raramente encontrada...
Una tarde, cuando era niño, me pasé varias horas persiguiendo el arco iris. Me perdí en el horizonte. Mis padres estaban desesperados. Yo estaba entonces convencido de que podría atraparlo. Creía ver el sitio donde tocaba el suelo. Contigo me pasa lo mismo...
siempre escondida, valiosa, muy buscada y raramente encontrada.
Como los tesoros que uno busca de pequeño y que nunca espera encontrar. Aquí sigo, me paso la vida buscándote pero tampoco espero encontrarte...nunca estás donde te busco, y apareces cuando menos lo espero...
ya no te espero,
no te busco,
puedes sorprenderme y volver a aparecer...